¿Qué
se requiere para “cimbrar” a México? Para estremecer a un país que ha sufrido
matanzas, ejecuciones extrajudiciales, noticias sangrientas, feminicidios,
linchamientos, operativos policiacos que concluyen en tragedia, actos
vandálicos de destrucción de oficinas y vehículos, tiene que ser algo que la
verdad no podemos ni queremos imaginar.
Esta
es la difícil tarea que, dice, llevará a cabo el gobernador electo del estado
de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, quien afirma que desde que resultó
electo el pasado 5 de junio ha recabado información sobre el gobernador con
licencia, Javier Duarte de Ochoa, misma que revelará el 1 de diciembre durante
su toma de posesión y que “va a cimbrar al país”.
¿En
relación a Duarte? ¿Hay algo respecto a este personaje que nos pueda sorprender
después de haber inventado más de 30 empresas fantasma para desviar 3 mil 300
millones de pesos? ¿O de que en su sexenio el estado de Veracruz sea aquél
donde más periodistas han sido asesinados? No, creo que no nos sorprendería.
¿O
va a rechazar las acusaciones que hiciera Duarte respecto a propiedades de lujo
por parte de Yunes y su familia, que sumarían sólo en Veracruz y la Ciudad de
México más de 400 millones de pesos? ¿Negará las acusaciones en contra de él, su esposa y sus tres hijos por delincuencia organizada y lavado
de dinero? Aunque presentara pruebas en su favor no “cimbraría”
a nadie. De plano lo único que sacudiría al país sería que revelara el paradero
de los 43 normalistas de Ayotzinapa. O tal vez ni eso.
Sin
embrago, esta supuesta revelación puede tener otra razón. La demanda de varios
actores de la política nacional era la salida de Duarte y un “castigo ejemplar”.
El 26 de diciembre el PRI marcó su distancia del controvertido personaje
suspendiéndolo de sus derechos partidistas, lo que no era en sí un castigo sino
un deslinde. El presidente del tricolor posteriormente pediría castigo para
Duarte y demás priistas corruptos, pero también para el gobernador electo de
Veracruz, acusado por actos de corrupción.
El
martes 11 de octubre de 2016 Duarte se reunió con Miguel Ángel Osorio Chong e
las oficinas de la Secretaría de Gobernación. El contenido de dicha plática no
se dio a conocer, pero el miércoles 12 de octubre el cuestionado gobernador
solicitó licencia al cargo en un escrito que fue recibido en el Congreso del
Estado a las 11:15 horas. Es difícil que se trate de una casualidad.
La
especie que recorría los ámbitos de la política era que se había llegado a la
salomónica decisión de sacrificar a ambos gobernadores de Veracruz, electo y en
funciones. Entonces y sólo entonces surgieron las amenazas de Yunes de
“cimbrar” a México apenas haya tomado posesión, pues se el rumor se completaba
con la versión de que no tomaría posesión del cargo. Si esta versión es cierta,
nos “cimbraremos” con la noticia de la destitución de Yunes. Tengamos paciencia
para ver el final de esta telenovela.
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